domingo, 29 de marzo de 2020

CORONAVIRUS: DESDE LA CONSPIRACIÓN AL CASTIGO DIVINO


Por Mariana Neira

Las pestes, plagas, epidemias, pandemias, son históricas, pero ¿por qué se dan?
Esta es una de las explicaciones científicas que encontramos:
“A través de los siglos, la zoonosis -como se conoce a la transmisión de enfermedades de animales a humanos- ha generado epidemias que han causado estragos existenciales, económicos y sociales a extensas comunidades.
Desde la llamada influenza española, pasando por las más modernas epidemias como el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS), las gripes aviar y porcina, hasta la actual pandemia de coronavirus, todas tienen un origen común: un virus exclusivo de poblaciones animales que muta, invade un humano y de ahí se propaga como patógeno nuevo humano.
En 2004, tras algunos de los brotes más severos conocidos hasta esa fecha de males como el SARS, gripe aviar y enfermedad de las vacas locas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que el creciente peligro de enfermedades animales que pueden infectar a seres humanos.
Detalles en: ‘5 graves epidemias causadas por virus que saltaron de animales a humanos’.
BBC News Mundo. 22 marzo 2020.
“Investigadores de la Universidad de Agricultura del sur de China identificaron al pangolín como un posible “huésped intermedio” que facilitó la transmisión del coronavirus, dijo la universidad en un comunicado, sin dar más detalles.
Un animal que alberga el virus sin estar enfermo y puede transmitirlo a otras especies se llama reservorio. En el caso del nuevo coronavirus se trata probablemente del murciélago. Según un estudio reciente, los genomas de este virus y los que circulan en este animal son idénticos en un 96%.
Pero el virus del murciélago no puede fijarse en los humanos receptores y debe sin duda pasar por otra especie para adaptarse al hombre, lo que se llama “huésped intermedio”. Después de haber estudiado 1.000 muestras de animales salvajes, los científicos determinaron que los genomas de las secuencias de virus estudiadas en el pangolín eran en un 99% idénticos a los de los pacientes infectados por el coronavirus de Wuhan.
Cada año se comercian ilegalmente en Asia y África 100.000 pangolines, una especie codiciada por los traficantes de animales salvajes, que la prefieren al elefante o rinoceronte, según la ONG WildAid. Su carne es muy apreciada por los sibaritas chinos y vietnamitas, y sus escamas, huesos y órganos son usados en la medicina tradicional asiática.
Detalles en la nota: ‘El pangolín, el extraño animal que podría haber transmitido el coronavirus a los humanos’. Infobae. 7 febrero 2020.

Los políticos culpan al ‘imperio’
Hasta ahí todo estaba clara, pero en los últimos tiempos, los ‘imperios’ del mundo han dejado de lado a los animales que transportan los virus para culpar de las epidemias, a virus creados artificialmente por el ser humano y, esta vez, el malo de la película es Estados Unidos que estaría intentando destrozar a China y Rusia que pretenderían ser el imperio No. 1 del planeta. No hay que ser muy inteligentes para darse cuenta que entre los tres están peleándose por ser el No. 1 y ahora que la comunicación está extendida, se hacen acusaciones mutuas, verdaderas o falsas. Ahora usan al coronavirus como arma de lucha.
Detalles puede verlos en las siguientes notas: ‘Coronavirus: ¿una guerra sin soldados?’ y ‘El equipo de investigación genética de Harvard recolectó y transfirió muestras de sangre y ADN de China a los Estados Unidos’.
Y hay otras notas con hipótesis terroríficas, como aquella que prevé que  junto con la vacuna “obligatoria” contra este virus, “se puede inyectar un nano-guión chip, desconocido para la persona que se está vacunando. El chip puede cargarse de forma remota con todos sus datos personales, incluidas las cuentas bancarias: dinero digital…”
Quienes escribieron estas notas quieren decir que los humanos estamos a punto de ser puestos bajo la mirada de ‘El gran hermano’ que todo lo ve, todo lo juzga, todo lo castiga.
Detalles en la nota: La pandemia del coronavirus COVID-19: El verdadero peligro es la “Agenda ID2020”.

Los astrólogos culpan a los astros
Más allá del debate (que más parece combate) científico político, hay teorías milenarias que manejan los astrólogos. Ellos atribuyen las epidemias al comportamiento de los astros. En el caso del coronavirus, dicen: “En enero de este año, se dio la conjunción de Júpiter con Plutón. En las otras oportunidades en las que en el mundo se dio esa configuración se produjeron sucesos muy importantes para la humanidad… las guerras mundiales, las bombas atómicas, la guerra fría, las crisis de Oriente y las guerras árabes-israelíes… La crisis del '30 y el ataque a las Torres Gemelas… pandemia de la mal llamada gripe española y la epidemia del SIDA”.
Más detalles en la nota: La “carta natal” del coronavirus: cómo seguirá la situación según la astrología.

Para los religiosos es castigo divino
En los libros religiosos se narran muchas pestes y plagas sucedidas antiguamente, antes y después de Cristo.
“El Mundo Antiguo se vio azotado por enfermedades que se extendieron velozmente con carácter epidémico o pandémico produciendo gran mortandad. Estas epidemias recibieron el nombre genérico de pestes. En la Biblia es donde se encuentran las primeras menciones de la peste. En el Antiguo Testamento hay claras alusiones a ella. En Éxodo (9,5) puede leerse: “Jehová dijo a Moisés y Aaron: Coged puñados de ceniza de horno y espárzala Moisés hacia el cielo a vista de Faraón y se convertirá en polvo menudo en toda la tierra de Egipto de lo que resultarán tumores apostemados así en los hombres como en las bestias”.
Todas las pestes se atribuían a un castigo de Dios por nuestros pecados. Es pecado todo acto que incumple con “los Diez Mandamientos escritos por Dios en piedra y luego registrados por Moisés en el libro de la Biblia del Éxodo”. Son los siguientes:
1º Amarás a Dios sobre todas las cosas.
2º No tomarás el Nombre de Dios en vano.
3º Santificarás las fiestas.
4º Honrarás a tu padre y a tu madre.
5º No matarás.
6º No cometerás actos impuros.
7º No robarás.
8º No dirás falso testimonio ni mentirás.
9º No consentirás pensamientos ni deseos impuros.
10º No codiciarás los bienes ajenos.
Los cristianos mantienen esta teoría y creen que porque muchos humanos violaron muchos de estos mandamientos, nos llegó el coronavirus, e invitan a orar a Dios para que calme su ira y acabe con la pandemia.
Detalles sobre las pestes posteriores se puede leer en: ‘Las primeras epidemias de la Historiahttp://www.portaldehistoria.com/secciones/epidemias/epidemias-antiguedad.asp
Los diez Mandamientos – ACI Prensa.
¿Quién tiene la razón? Dígalo usted. Lo cierto es que este coronavirus nos mantiene en una cuarentena e incertidumbre que ya no aguantamos.